El Hôtel de la Cigogne, cerca del lago Léman, en el corazón de la ciudad y del barrio de negocios, le permite impregnarse de la atmósfera tan característica de Ginebra. A dos pasos, los principales monumentos, las boutiques de lujo de la Rue du Rhône, el lago Léman, la naturaleza…
Desde el hotel, descubrirá una ciudad desbordante de encanto, con su centro histórico jalonado de terrazas floridas, de vendedores de libros y dominada por la catedral San Pedro, pero también sus jardines, sus muelles y sus museos. Historia, cultura, arte y botánica están en el programa de su descubrimiento de Ginebra.
Pasee por las calles adoquinadas del casco antiguo de Ginebra para descubrir las numerosas joyas que se esconden en sus vecindarios: Saint Gervais en la orilla derecha del Ródano y Cité-Center en la orilla izquierda. La sombra protectora de la catedral de Saint-Pierre, construida en la colina, domina esta antigua ciudad medieval fortificada, que también alberga el Ayuntamiento y el Jardín Inglés.
Inscrita en la lista del "Patrimonio europeo", la catedral San Pedro, su fachada neoclásica, sus capiteles góticos y románicos, su capilla de los macabeos y su sitio arqueológico, es el monumento más visitado de Ginebra. Es indispensable escalar los 157 escalones que llevan a la cúspide de las torres para descubrir un magnífico panorama de Ginebra, del lago Léman y de las montañas circundantes.
A solo 10 minutos del Hôtel de la Cigogne, la catedral San Pedro, desde lo alto de sus torres, le ofrecerá un panorama único sobre la ciudad de Ginebra y el lago Léman.
Desde el hotel cerca del lago de Ginebra, puede admirar el famoso Jet d'eau, que se extiende a más de 140 metros en el corazón del puerto. Este símbolo de Ginebra, nacido en el siglo XIX de la necesidad de reducir la presión en las tuberías municipales, se beneficia cada noche de una iluminación especial. Desde la playa de Bains des Pâquis disfrutamos de lo mejor del espectáculo. Geneva Jet d'Eau funciona casi todo el año y alcanza una impresionante altura de 140 metros, con una velocidad de salida de agua de 200 km / hora. Es uno de los símbolos de Ginebra, visible desde muchos puntos del centro de la ciudad.
A unos cien metros del hotel, en pleno corazón del Jardín inglés, descubra el parterre más visitado de Ginebra Esta obra floral, que se cambia regularmente, existe desde 1955 en la ciudad de Ginebra. Esta obra de arte compuesta por ocho esferas, agujas y un segundero de más de dos metros, condensa en sí todo el saber hacer ginebrino en materia de relojería y de botánica. La hora es regulada por satélite, mientras que los colores de las flores se renuevan con regularidad.
Más informaciónA nivel mundial, el Palacio de las Naciones de Ginebra es el más importante centro de la ONU después de la sede de Nueva York, pero es también el centro de conferencias internacionales más activo del mundo con cerca de 8 000 reuniones al año. Usted puede visitar el Palacio de las Naciones de Ginebra. La sala de los Derechos Humanos, reconocida por su magnífica escultura que cubre todo el techo vale la pena visitarla. Debe saber que las visitas duran casi una hora de lunes a viernes. Desde el Hôtel de la Cigogne, hay que contar 10 minutos en taxi para llegar al Palacio de las Naciones.
Ginebra posee un patrimonio de una inestimable riqueza. No menos de 40 museos hacen brillar la ciudad de Calvino, sean tanto centros de arte, galerías, museos municipales o privados. Están representados todos los dominios: las artes (el museo de arte y de historia, el centro de arte contemporáneo), la botánica (el conservatorio y jardín botánico), las letras (el Instituto Voltaire), las ciencias (el museo de historia natural) y, claro está, la relojería (el museo Patek Philippe). La visita del museo internacional de la Cruz Roja también es ineludible.
Es imposible alojarse en Ginebra sin pasearse por las orillas del lago Lemán, incluso hacer un paseo en barco sobre sus aguas, que también será la oportunidad para descubrir poblados llenos de encanto como Nyon o incluso Ivoire.
En el centro de Ginebra podrá relajarse a pocos metros del Chorro de agua en la playa de Bains des Pâquis. Durante el verano, se viene aquí para tomar sol y para disfrutar de sus actividades de ocio. Durante el invierno, uno se puede relajar disfrutando de la magnífica vista sobre el lago.
